Abstract
This work discusses the political, intellectual, and moral dilemmas which confront the Latin American artist in exile. The author analyzes the contribution which the artist makes to the democratic and cultural renewal of his/her country-in this case, Argentina. Exile is seen as a paradoxical phenomenon in which there is a constant conflict between beneficial and negative aspects. It is an experience conducive to self-marginalization and self-pity. However, it is also an experience which allows the committed artist to widen her/his horizons, gaining a broader perspective on the immense social, political, economic and cultural problems facing Latin America towards which the artist has a moral responsibility. The artist who returns to Argentina (together with other compatriots) does so with a more tolerant, cautious, and integrating vision. At the same time, the artist encounters a rich literature which is capable of challenging and changing the society. Finally, the author emphasizes the rise of a generation of young writers who are making a fundamental contribution to Latin American literature within the context of a fight for democratic and cultural restoration.
Resumen
Este trabajo discute los dilemas políticos intelectuales y morales que enfrenta el artista latinoamericano en el exilio y analiza el aporte que el artista presta a la recuperación democrática y cultural de su país-en este caso, la Argentina. Se plantea que el exilio es un fenómeno paradojal en el cual hay un constante conflicto entre aspectos beneficiosos y negativos. Es un campo propicio para la automarginación y la automisericordia. Pero, por otro lado, es una experiencia que permite que el artista comprometido amplie sus horizontes en términos de un mayor entendimiento de los inmensos problemas sociales, políticos, económicos y culturales de América Latina, ante los cuales éste tiene una responsabilidad moral. Se señala que el artísta que vuelve a la Argentina (junto a otros compatriotas) lo hace con una visión más tolerante, cautelosa e integradora. A la vez, éste encuentra una literatura rica, capaz de cuestionar la sociedad y mejorarla. Finalmente, se resalta el surgimiento de una generación de escritores jóvenes que están haciendo un aporte fundamental a la literatura latinoamericana dentro del contexto de lucha por la recuperación demócratica y cultural.
